Estos Son Los Enemigos De Una Imagen Profesional
- Red Noreste
- 2 may 2019
- 2 Min. de lectura

Tienes el talento pero no avanzas en tu profesión? ¿Sabías que un simple outfit formal puede hacer que consigas o no un trabajo?
En la vida laboral la imagen cuenta. Además de tus conocimientos y habilidades, tu apariencia también será evaluada en muchos escenarios: en una entrevista de trabajo, para obtener un ascenso o para asignarte algún proyecto.
¿Injusto? Yo diría lógico. Tu ropa, tu cabello, tus uñas y hasta los accesorios que usas forman parte de ti y proyectan lo que hay en tu interior, envían mensajes y transmiten emociones. Por ello es tan importante que así como inviertes en tu preparación, inviertas en tu apariencia y logres tener un outfit formal.
Hay muchas formas de verse bien en la oficina, depende mucho de tu profesión, tu edad y tu estilo propio, pero hay reglas básicas que no debes olvidar para tener una imagen profesional apropiada. La clave está en usar prendas y accesorios que vayan de acuerdo a tu posición y ¿por qué no? a tus aspiraciones.
Así que aquí te dejamos algunos errores que seguramente arruinarán tu imagen en la oficina.
Jeans rotos: puede que estén de moda, pero no son adecuados para el trabajo.
Ropa deportiva: reserva tus pants y sudaderas para el gimnasio, a menos que seas instructor deportivo nunca los lleves a la oficina.
Gorras y sombreros: estos accesorios están bien para un fin de semana, pero no para un día de trabajo.
Calzado informal: tenis, sandalias abiertas, Crocs y zapatos con grandes plataformas le restan seriedad a tu imagen.
Ellos: zapatos sucios o sin calcetines. Un buen atuendo puede arruinarse cuando los zapatos no están bien limpios o no usas calcetines ¡Cuida los detalles!
Ellas: maquillaje y accesorios extravagantes. Será difícil conseguir un ascenso si lo único que llama la atención en ti son tus collares metálicos, tus uñas decoradas o las toneladas de delineador negro que te pones.
Ellos: ropa arrugada. Quizá el guardarropa de un hombre es más simple que el de una mujer, pero cada detalle cuenta: jamás uses prendas sin planchar.
Ellas: estampados atrevidos. Ir a la oficina con una playera que dice “Sexy Girl” ¡Grave error! Unos leggins de animal print tampoco son apropiados.
Puede ser que alguna de las prendas anteriores formen parte de tu estilo personal, pero sin duda no son la mejor elección para tu vida laboral.
¿Excepciones? Siempre las hay. Quizá trabajas en un despacho de diseño donde nadie te juzgará por llevar el cabello azul. O tal vez eres un programador que puede ir a la oficina con jeans deslavados. Pero incluso quienes tienen estas ‘ventajas’ pueden obtener más si tienen una apariencia que inspire confianza, respeto y profesionalismo.
La imagen no lo es todo, pero sí importa y es algo que una persona promedio puede lograr sin invertir mucho dinero.
Fuente Eme de Mujer.
Commenti